El incremento de la esperanza de vida con el consecuente aumento de las enfermedades asociadas con la edad, el creciente consenso científico que respalda el consumo de suplementos como una forma segura y eficiente de mantener un estado de salud óptimo sumado a un importante desarrollo regulatorio en este ámbito y a un consumidor cada vez más informado y preocupado por su bienestar han permitido que la industria de los complementos alimenticios atraviese, hoy en día, uno de sus mejores momentos.
Así lo pone de manifiesto el documento publicado por IADSA (International Alliance of Dietary/Food Supplement Associations), asociación internacional de la que Afepadi forma parte. Con el título “La evolución de la industria de los complementos alimenticios. De la década de los 90 hasta nuestros días”, la entidad hace un repaso a los últimos veinte años de la industria de los complementos alimenticios. La principal conclusión es que el sector se está convirtiendo en actor principal a la hora de afrontar los principales desafíos a nivel de salud a los que se enfrenta el mundo hoy en día.
Evolución legislativa sobre los complementos alimenticios
Sin embargo, como se apunta en el mismo documento, el camino hasta llegar hasta aquí no ha sido fácil. La falta de una normativa específica sobre complementos alimenticios en todo el mundo ha impedido el desarrollo del sector durante muchos años. Las trabas comerciales a falta de un marco regulatorio, han dificultado y puesto freno a su expansión. Primero la legislación norteamericana sobre complementos alimenticios, luego la Directiva 2002/46 europea y, por último, las iniciativas que se están dando en Asia y Sudamérica han logrado desencallar la situación y permitido una mayor confianza entre los consumidores que ha derivado, a su vez, en un aumento en las ventas de suplementos.
El papel de la ciencia en los complementos alimenticios
Junto a un desarrollo regulatorio, la ciencia también ha jugado un papel destacado en el desarrollo, crecimiento y consolidación de la industria de los complementos alimenticios. A partir del año 2000, el nuevo enfoque sobre el papel de los complementos alimenticios a la hora de ayudar a prevenir algunas enfermedades no transmisibles y el aumento de la inversión en investigación que ha ido confirmando esta hipótesis, han conseguido que el consumidor confíe en este tipo de productos y haga un consumo mucho mayor.
En todo este panorama también ha influido la evolución del propio consumidor que, además de apostar por estilos de vida muchos más saludables, ha pasado de tener una actitud pasiva a activa “exigiendo” a fabricantes y distribuidores a brindar soluciones que den respuesta a sus necesidades en el ámbito de la nutrición y el bienestar.
Complementos alimenticios y gasto sanitario
En el documento de IADSA también se menciona el importante papel que puede desempeñar la industria de los complementos alimenticios y sus productos a la hora de reducir el gasto sanitario a nivel mundial. El aumento de la esperanza de vida con el consecuente incremento de patologías asociadas a la edad (cardiovasculares, óseas, visuales, etc.) y enfermedades como la obesidad, catalogadas por la OMS como epidemia, empiezan a poner en jaque a los sistemas sanitarios en todo el mundo al implicar una carga financiera difícil de sostener durante mucho tiempo. En ese sentido, la inclusión de los complementos alimenticios dentro de las políticas de prevención de determinadas enfermedades podría aligerar y disminuir el elevado gasto sanitario.
Aunque está claro que la industria vive un momento de expansión con una tendencia al alza, desde IADSA se apunta que es importante seguir trabajando para aprovechar al máximo esta voluntad de colaboración y entendimiento entre asociaciones del sector, autoridades políticas y comunidad científica para mantener el crecimiento de la industria de los complementos alimenticios a nivel mundial y ofrecer soluciones al consumidor, una opinión que compartimos desde Afepadi.
