A nivel mundial, el mercado de envases y embalajes para complementos alimenticios, nutracéuticos, alimentos para deportistas y productos dietéticos alcanza la la cifra de 2,49 billones de euros con una tasa de crecimiento anual compuesto (CAGR) del 4,5% para los próximos diez años, según un reciente informe de Future Market Insights. Europa representa alrededor de 843 millones de euros en este importante mercado del packaging y se prevé un crecimiento del 5,1% de CAGR hasta 2028.

Como se apunta en el informe de la consultora, los fabricantes no pueden esperar a que un suplemento o producto nutricional tenga un buen rendimiento en ventas si no consigue llamar la atención desde el lineal. De hecho, tampoco importa que se venda en una tienda minorista especializada, en un gran almacén o en una plataforma de correo electrónico. Hoy en día, la credibilidad de la marca y la calidad influyen en las decisiones de compra de los consumidores y sólo invirtiendo en envases adecuados y llamativos que consoliden la imagen de marca se puede lograr que un producto tenga éxito.

Trabajar la marca

Tal y como se apunta, una parte esencial de la primera conexión entre el consumidor y la marca consiste en diseñar envases de dentro hacia afuera empezando por los valores de la marca, siguiendo por la personalidad del producto para pasar, luego, a construir hacia afuera la identidad y los mensajes. Si se consigue, el packaging reflejará fielmente los atributos de la marca con los que el target acabará identificándose y comprando el producto.

Un branding consolidado se puede lograr a través de la innovación en el packaging. Como se señala desde la consultora, un envase innovador tiene más probabilidades de cautivar a un público potencial que cualquier otro que no apueste por un diseño actual. De todas formas, dependiendo de la categoría, la tendencia evoluciona en un sentido u otro. Así, por ejemplo, en la industria de los suplementos dietéticos, los consumidores buscan un packaging llamativo, pero sin demasiadas estridencias. Buscan sobre todo simplicidad en las formas y claridad a la hora de transmitir los mensajes. En cambio en el sector de las bebidas funcionales, a pesar de que se exige claridad a la hora de informar, se reclama una identidad gráfica audaz y contemporánea, de la misma forma que en determinados complementos alimenticios.

Eco-friendly

El hecho de que los consumidores de hoy sean más conscientes de la sostenibilidad, la trazabilidad y la transparencia en la cadena de suministro, obliga a la industria a estar pendiente de estos temas y a trasladarlos de manera adecuada a sus públicos a través del packaging. No sorprende, por tanto, que los consumidores encuentren especialmente atractivos aquellos envases elaborados con materiales 100% reciclables o compostables. El reto, sin embargo, viene por la parte de los diseñadores gráficos que se ven obligados a ofrecer innovaciones eco-friendly en el envasado.

Desde Future Market Insights se insiste también que, independientemente de las modas y tendencias, la información sigue siendo un valor en alza entre el consumidor que valora, por encima de todo, facilidad y claridad a la hora de poder leer los ingredientes y nutrientes que contienen un determinado producto. La información es un factor clave para el éxito a medida que los nuevos consumidores están más informados. A raíz de esta necesidad, el etiquetado inteligente empieza a ganar posiciones y se prevé que cobre mayor protagonismo durante los próximos diez años. En cuanto a formatos, los envases pequeños empiezan a ganar cuota de mercado frente al packaging mediano y grande.

Desde Afepadi opinamos que es importante que la industria apueste por un packaging de producto y atienda las nuevas tendencias del mercado y demandas de los consumidores. En cualquier caso, es fundamental que cualquier innovación en esta área se adapte siempre a los requisitos y responsabilidades que rige la información alimentaria y, en particular, el etiquetado de alimentos con el fin único de garantizar la seguridad del consumidor y su derecho a la información tal y como se recoge en la normativa europea.