Tal y como apunta la investigación, el concepto de la nutrición personalizada surgió a raíz de la secuenciación del genoma humano en el año 2000 y consiste en adaptar el asesoramiento dietético a las características particulares de un individuo. Se esperaba que, con la identificación de las interacciones gen-nutriente, se comprendería mejor la respuesta de un individuo a una dieta en particular y, por tanto, se podrían aconsejar modificaciones en la dieta enfocadas a optimizar la salud y a reducir el riesgo de enfermedades.
El proyecto Food4Me comenzó en 2011 y se completó en 2015 y en él han participado siete estados europeos: Alemania, España, Grecia, Holanda, Irlanda, Polonia y Reino Unido. Entre las áreas exploradas, se ha valorado el potencial de futuras propuestas personalizadas en nutrición y un análisis de las actitudes y creencias de los consumidores en torno a todos los aspectos de la nutrición personalizada.
La investigación estima que el mercado en Europa para la nutrición personalizada podría estar entre 42 y 93 millones de consumidores, lo que implicaría un valor potencial de entre los 8 y 46 mil millones de euros para el año 2030. La complejidad del modelo de negocio de la nutrición personalizada y su fuerte vínculo con los cambios sociales indica que ésta probablemente se desarrolle como resultado de la combinación de iniciativas públicas y privadas.
Durante todo el proyecto, los resultados más significativos se han ido difundiendo a través de la publicación de varios artículos en revistas científicas tales como: Factors influencing European consumer uptake of personalised nutrition (Stewart-Knox et al. 2014), Psychological Determinants of Consumer Acceptance of Personalised Nutrition (Poínhos et al. 2014), Effects of a Web-Based Personalized Intervention on Physical Activity in European Adults: A Randomized Controlled Trial (Marsaux et al. 2015), Changes in Physical Activity Following a Genetic-Based Internet-Delivered Personalized Intervention: Randomized Controlled Trial (Marsaux et al. 2016).
La investigación con respecto a los futuros modelos de asesoramiento dietético personalizado indicó que podrían clasificarse en tres enfoques: por un lado, el nivel de diagnóstico para establecer un perfil nutricional individual; en segundo lugar, el nivel de la conducta alimentaria, donde el asesoramiento se adapta a las preferencias personales de alimentos y estilo de vida y, finalmente, a nivel psico-social donde el acompañamiento está adaptado para ajustarse a preferencias personales.
La información proporcionada por la investigación del proyecto Food4Me asegura que tanto el público, la industria como los organismos de investigación podrán estar mejor informados acerca de lo que realmente se puede alcanzar mediante la nutrición personalizada. Se espera que el análisis detallado y reflexivo de la nutrición personalizada, llevado a cabo por el proyecto, ayudará a reguladores y futuros operadores de la nutrición a tener más claras las futuras necesidades del consumidor y, a éstos, a tomar decisiones bien informadas.