Los sport foods deberían definirse como productos especialmente diseñados para cubrir las necesidades derivadas de un esfuerzo muscular intenso o prolongado y ayudar a mejorar el rendimiento físico y/o adaptación al entrenamiento. Esta definición debería contemplar que los alimentos para deportistas están científicamente formulados para ayudar en la preparación y en la recuperación tras el ejercicio y que, bajo determinadas circunstancias, los sport foods pueden ayudar a tolerar entrenamientos más intensos favoreciendo una rápida recuperación tras el esfuerzo o ayudando a evitar lesiones.
En términos generales, los alimentos para deportistas se pueden dividir en cuatro subcategorías diferentes, de acuerdo con el Comité científico de la alimentación:
-Productos de alto valor energético ricos en carbohidratos
-Soluciones electrolíticas a base de hidratos de carbono
-Proteínas y componentes de las proteínas
-Complementos alimenticios que contienen sustancias como la cafeína, aminoácidos o creatina
Una dieta variada y equilibrada es indispensable para cubrir los requisitos nutricionales de cualquier deportista. Los sport foods ayudan a los deportistas en este equilibrio nutricional yendo más allá atendiendo sus necesidades específicas. Teniendo en cuenta ciertos aspectos del ejercicio muscular intenso como duración, frecuencia e intensidad, los deportistas pueden beneficiarse de determinados productos e ingredientes más allá de las recomendaciones nutricionales para la población general. La conveniencia de uso de estos productos es evidente cuando facilitan cubrir los requisitos nutricionales adaptándose a las condiciones de la práctica deportiva (por ejemplo, los ciclistas).
Los alimentos específicos para deportistas han de garantizar que están libres de cualquier sustancia dopante. Para ello es importante una regulación que recoja sus particularidades.
Por otro lado, la práctica de ejercicio intenso y el reto de mejorar el rendimiento, a largo plazo, pueden llegar a ser factores de riesgo para un deportista. Por tanto, se han de tener en cuenta ciertos aspectos de vulnerabilidad entre este grupo de población:
-A nivel fisiológico: cuanto más desarrollado está el músculo mayor es el riesgo de sufrir alguna lesión
-A nivel metabólico: el impacto del desfase entre la necesidad nutricional y el aporte real es más importante entre los deportistas que en la población general.
-A nivel sociológico: las limitaciones de entrenar muchas veces a la semana y los propios desplazamientos para las competiciones crean dificultades para alimentarse adecuadamente.
-A nivel psicológico: la presión de la competición y de mejorar el rendimiento pueden empujar a ciertas personas a sobrepasar su capacidad aumentando el riesgo de sufrir lesiones o accidentes cardiovasculares.
-Riesgo de prácticas adictivas: una mala alimentación disminuye el rendimiento y aumenta el atractivo hacia prácticas adictivas insalubres.
Teniendo en cuenta estos aspectos, es necesario seguir trabajando para alcanzar una regulación específica de los sport foods. Así, se protegerían la salud e intereses del consumidor asegurando que se les proporciona la información necesaria para tomar decisiones bien informadas sobre qué productos son los más adecuados para sus necesidades nutricionales y aquellas derivadas del rendimiento físico.
