El estudio “Ingesta de ácidos grasos poliinsaturados omega-3 y omega-6, determinantes y fuentes dietéticas en la población española: Resultados del estudio Anibes”, publicado en ‘Nutrients’, se ha centrado en identificar el consumo en la dieta de los españoles de omega-3 y omega-6. También ha evaluado la ingesta de ácido fólico, vitamina B12 y colina, al ser vitaminas y cofactores que intervienen en los beneficios que se atribuyen al consumo de ácidos grasos.
Los datos de ingesta se han obtenido del estudio transversal ANIBES sobre una muestra representativa de la población española (de 9 a 75 años), en la cual se analizó la ingesta dietética durante tres días. Los resultados evidencian que el 65% de la población española no toma suficiente omega-3. Además, si se contemplan los niveles de consumo de ácido fólico, vitamina B12 y colina, se observa que el 21,3% de la población Anibes no alcanza los objetivos nutricionales que marca la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA) sobre el consumo diario de estos nutrientes.
Los resultados obtenidos abren la puerta a considerar el diseño de pautas de nutrición individualizadas que incluyan el consumo de complementos alimenticios, considerando en todo momento los beneficios que se demuestran a través de la evidencia científica. Tal y como afirman los autores del estudio, “esta investigación pone de manifiesto que la ingesta media de ácidos grasos poliinsaturados omega-3 en la población no cumple con las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud (OMS)”. Ante esta realidad, “es recomendable aumentar el consumo de pescado y considerar también el de alimentos enriquecidos y/o complementos alimenticios con estos ácidos grasos”, prosiguen los investigadores.
Aumento de los complementos alimenticios en los consumidores, una realidad cada vez más evidente
La inclusión de los complementos alimenticios en las pautas de nutrición individualizadas coincidiría con la tendencia actual de los consumidores en cuanto al consumo de estos productos.
La pandemia ha generado cambios en los hábitos de consumo de los ciudadanos, y también en el consumo de alimentos y complementos alimenticios. Según datos de la Global Consumer Survey de Statista, el 49% de la población española consume vitaminas de forma recurrente, una cifra ligeramente por debajo de la media europea pero igualmente notable.
Estos datos responden a la tendencia alcista del sector. Y es que, según un informe de Big Data IRI, el sector complementos alimenticios crecerá a un ritmo del 8,2% hasta 2027.