CLYMBOL, es el estudio más exhaustivo llevado a cabo hasta la fecha tanto por el número de países participantes como por el alcance de la investigación. El proyecto, que se inició en 2012, utiliza varios métodos de investigación: muestreo de producto, encuesta transnacional, rastreo ocular (qué miran los consumidores y durante cuánto tiempo), entrevistas y experimentos en el punto de venta y en laboratorio.
Hasta la fecha, este es el primer estudio en analizar diversos estados de la UE, empleando los mismos métodos y obteniendo resultados después de que el Reglamento (EC) 1924/2006 entrara en vigor. Este estudio proporciona un ejemplo de cómo observar la prevalencia de claims actualmente en el mercado, una tarea importante para la aplicación de la legislación y fuente de información para futuras regulaciones.
Más allá de los resultados obtenidos tras el análisis, el proyecto también enumera una serie de recomendaciones para que los consumidores tomen decisiones informadas y fomentar la competitividad de la industria, teniendo en cuenta las diferencias entre los países de la UE:
Designar una autoridad nacional responsable de la evaluación del impacto de las declaraciones de propiedades saludables y los símbolos de salud y responsable de informar o educar a los consumidores en esta materia.
Fomentar la colaboración entre las partes interesadas, darles la posibilidad de medir y controlar los efectos de las declaraciones de propiedades saludables y los símbolos de salud.
Informar a los consumidores sobre las declaraciones de propiedades saludables y símbolos de salud con el objetivo de mejorar su comprensión general sobre un estilo de vida saludable.
Investigar la comprensión, conciencia y actitudes del consumidor hacia las declaraciones de propiedades saludables, símbolos y factores contextuales y los posibles efectos sobre la elección de alimentos, compra y consumo.
Proveer a los consumidores de información precisa acerca de nuevos nutrientes o de aquellos menos familiares para ellos.
Centrarse en la forma de mejorar la motivación aumentando el interés del consumidor en la alimentación saludable.
Medir los efectos en la salud pública (cambios en el estado de la salud pública como resultado del uso de declaraciones de propiedades saludables y símbolos de salud) y analizar el impacto económico a largo plazo.
Tener en cuenta el equilibrio entre la regulación de las declaraciones de propiedades saludables y la posible obstaculización de las iniciativas en innovación.
Incluir información sobre la comprensión de los consumidores de una declaración de propiedad saludable para obtener la aprobación de uso por parte de la EFSA (European Food Safety Authority).
Las conclusiones del estudio dan a conocer el efecto real de la información sobre el comportamiento del consumidor en relación con la elección de alimentos con beneficios saludables. Si además, la normativa de complementos alimenticios incluyera las menciones obligatorias sobre las funciones nutricionales y fisiológicas el consumidor contaría con todas las garantías en cuanto a protección económica y sanitaria.