La propuesta se refiere a posibles problemas de seguridad de los microplásticos. Según ECHA, los microplásticos son elementos de dimensiones muy pequeñas que pueden terminar en la cadena alimentaria. Además, son muy resistentes a la (bio) degradación, pueden dar lugar a nanopartículas de plástico y son prácticamente imposibles de eliminar del medio ambiente una vez liberados. Se calcula que la cantidad de microplásticos que, actualmente, se liberan al medio ambiente ronda las 36.000 toneladas/año. Las restricciones apuntan a lograr una reducción acumulativa de emisiones de aproximadamente 400.000 toneladas de microplásticos en 20 años. La propuesta que se está estudiando excluye los microplásticos “secundarios” que se forman por degradación progresiva de artículos a base de polímeros sintéticos más grandes y los microplásticos biodegradables.
Cómo afecta a los complementos alimenticios
En la propuesta, los complementos alimenticios están considerados como fuente de microplásticos con uso intencional debido a la utilización de los siguientes aditivos alimentarios:
- E-1205: Copolímero de metacrilato básico (límite máximo: 100.000 mg/kg)
- E-1206: Copolímero de metacrilato neutro (límite máximo: 200.000 mg/kg).
- E-1207: Copolímero de metacrilato aniónico (límite máximo: 100.000 mg/kg).
- E-1208: Copolímero de polivinilpirrolidona-acetato de vinilo (límite máximo: 100.000 mg/kg).
Actualmente, estos aditivos alimentarios están autorizados a través del Reglamento 1333/2008 para su uso en complementos alimenticios en formato sólido como agentes de “liberación controlada” y para ocultar sabores desagradables, con propiedades de formación de película.
Según la propuesta, se podrían tomar medidas al respecto y restringir su uso sin un periodo de transición especificado. Todo dependerá del dictamen que emita ECHA después de evaluar las aportaciones durante el proceso de consulta que se abrió el pasado mes de marzo y finalizó en septiembre.
Food Supplements Europe, entidad que representa los intereses de la industria de los complementos alimenticios a nivel europeo, considera que prohibir el uso de estos aditivos en estos productos no está justificado, opinión que compartimos desde Afepadi. Se trata de aditivos que están legalmente autorizados y además tienen una función técnica sin alternativas posibles. Por otra parte, es más que probable que el impacto negativo que puedan provocar los complementos alimenticios sobre el medio ambiente sea mínimo. A todo esto, hay que añadir que los costes que supondría la reformulación de los productos serían elevados con el consecuente freno que supondría para la expansión y crecimiento del sector.