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Jueves, 09 Febrero 2017 10:52

Actualizada la guía de orientación para la solicitud de Health Claims

La Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA) ha actualizado su guía de ayuda sobre cómo preparar y presentar una solicitud de declaración de propiedad saludable. La guía presenta un formato estandarizado para todas las solicitudes. También detalla el tipo de información y datos que los solicitantes deben presentar para sustentar su claim. Esta es la primera actualización desde 2011.

Esta última actualización está en línea con la orientación científica general que la EFSA publicó el año pasado sobre el proceso de evaluación de una declaración de propiedad saludable ofreciendo a los solicitantes una mejor comprensión de los criterios de evaluación.

La nueva guía es una actualización de la versión del 2011 e incorpora la experiencia adquirida durante estos últimos años en el proceso de evaluación de las declaraciones de propiedades saludables. La actualización se ha completado con los comentarios resultado de una consulta pública de ocho semanas llevada a cabo durante el verano pasado.

Además de la información administrativa y técnica requerida, se destaca que un expediente de solicitud debe incluir: datos sobre la caracterización del alimento o componente alimenticio para el cual se hace el claim; información para permitir la caracterización del efecto declarado y datos -publicados e inéditos- para justificar la declaración de propiedad saludable.


Criterios de evaluación más adecuados

Esta actualización, en linea con la actualización de la orientación científica del año pasado, a priori redunda en un proceso de evaluación más eficiente beneficiando tanto a los solicitantes como a los consumidores. Pero, desde Afepadi consideramos que la EFSA continua teniendo pendiente la revisión de unos criterios de evaluación más adecuados a las necesidades del consumidor en materia de complementos alimenticios; es decir, unos criterios  que  permitan a los consumidores tener acceso a información sobre los potenciales beneficios saludables de determinados ingredientes, siendo esto necesario en la toma de decisiones respecto a su alimentación, al tiempo que se protegen sus intereses económicos.

Mientras, no está permitido a los fabricantes de complementos alimenticios comunicar cuál es el beneficio del producto o para qué está destinado; salvo el estrecho margen que permite el Reglamento 1924/2006, o lo que todavía es peor: la existencia en el mercado de gran número de productos sin la más mínima información sobre su destino y utilidad.

 

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