La nutricosmética está viviendo su momento de expansión. El informe que acaba de publicar WiseGuyReports titulado “Global Beauty Supplements Market Outlook” confirma el crecimiento de esta industria a nivel mundial. Según los datos ofrecidos, el mercado global de los suplementos de belleza alcanzó la cifra de los 2.800 millones de euros en 2016 y se espera superar con creces la cantidad de los 5.000 millones de euros para finales de 2024 con un crecimiento previsto en torno al 8,6% anual.
Por zonas, Asia-Pacífico representa la mayor cuota de participación en el mercado mundial y se espera que siga manteniendo esta hegemonía durante el periodo analizado (2016-2024). Japón es el territorio asiático con mayor demanda seguida de cerca por China y Corea que experimenta un notable aumento debido al creciente interés de la población masculina por los complementos de belleza.
Por detrás del gigante asiático, se encuentra Europa con más del 25% de participación en el mercado. Los países de Europa occidental como Francia, Alemania y Reino Unido, entre otros, representan una importante fuente de ingresos para la industria nutricosmética cifrada en más del 20% del total. Por último, y por detrás de Europa, se encuentra Norteamérica.
Los motivos del “boom” nutricosmético
Son varias las razones que explican el notable crecimiento del sector de la nutricosmética. La principal es el progresivo envejecimiento de la población. Cada vez hay más gente adulta y eso conlleva que el gasto en productos de belleza sea cada vez mayor si partimos de que es un target clave. Pero también hay otros motivos que se detallan a continuación:
- Cambios en los hábitos de vida. Hay un aumento de la conciencia sobre la salud entre los consumidores.
- Aumento de la demanda de productos naturales para la salud y belleza.
- Los hombres también se cuidan. La cosmética en general y la nutricosmética, en particular, dejan de ser territorios únicamente femeninos. El hombre se preocupa también por su apariencia física.
- Comodidad. La nutricosmética es práctica porque se consume vía oral sin necesidad de aplicación tópica de ningún tipo.
Retos de la nutricosmética
Pese a que el informe de WiseGuyReports pronostica un notable crecimiento y expansión en los próximos años, también se menciona uno de los retos al que deberá hacer frente la industria nutricosmética si quiere mantener el ritmo de crecimiento previsto. Según este informe, la disponibilidad relativamente nueva de estos productos todavía puede generar ciertas reticencias entre sus públicos potenciales. Es un mercado joven que, como apunta este estudio, necesita ampliar su confianza y demostrar que los productos que se comercializan ofrecen resultados. El informe confirma que aunque se ha avanzado mucho en este sentido, todavía hay un trabajo importante por hacer.
Paralelamente a este tema, también es necesario poner solución al tema de las declaraciones de belleza que puede acabar frenando la expansión y consolidación de este mercado y que, de hecho, hoy en día, ya dificulta el comercio entre estados europeos. Según la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA) las "beauty claims" que utilizan los nutricosméticos están fuera del ámbito de aplicación del Reglamento (CE) 1924/2006 sobre declaraciones nutricionales y de propiedades saludables en los alimentos porque no responden a su definición. Este criterio no está compartido por las autoridades de algunos Estados miembros de la UE, lo que genera diferencias en los distintos mercados que dificultan, cuando no obstaculizan, la libre circulación de mercancías.
Desde Afepadi venimos reivindicando, desde hace años, una solución a este tema. Desde la asociación proponemos la incorporación de los requisitos aplicables a los productos nutricosméticos, especialmente en lo que a declaraciones de belleza se refiere, dentro del marco de los complementos alimenticios, es decir, incluir las directrices para la utilización de tales declaraciones en una norma en forma de Reglamento que actualice y sustituya a la Directiva 2002/46/CE, sobre complementos alimenticios.
Puesto que es evidente que el Reglamento (CE) 1924/2006 es inadecuado, esta solución aportaría las garantías suficientes tanto para los consumidores como para los operadores económicos, al tiempo que facilitaría el comercio intra-comunitario.
